El rancio en la playa
Nota del moderador: el Sr. Robles no ha estado en el Rocío, lo cual no es bueno ni malo, sino todo lo contrario. Este fin de semana hemos ido a la playa, donde hemos comprobado que el rancio se deja ver y se deja notar incluso -algunos dicen inclusive- al borde del mar. Camisa de manga larga remangadita, bañador con reminiscencias meybianas, alpargata de esparto tipo Calvario... Suelen ir de Calvin sin Klein, esto es, ligeros de equipaje capilar, carencia que suplen con sombreros de paja si cojean de la pata rociera o con gorras que lucen algún aditamento rancio: los colores rojo y gualdo son síntomas evidentes de rancidez playera. En el chiringuito beben cruzcampo bien fría, y si no cojean del todo se dedican a mirar las gachís en bikini, aunque su especialidad es el top-less: y es que un rancio siempre está más caliente que un guiso de papas...
posted by Canal Rancio Blog's @ 11:27 a. m.
5 Comments:
Hay que empezar aclarando que el rancio no es que suela ser calvo, lo que ocurre es que dado su compromiso cristiano es donante de pelo.
Aclarado esto, decir que donde realmente aparece el rancio playero es por la noche, en cualquier terraza heladería del lugar, luciendo camisa blanca e impoluta de mangas largas remangadas con un par de vueltas, pantalón azul marino con correa con los colores de la bandera nacional y zapatillas blancas. Moreno micro-ondas – algunos le llaman uva – y paquete de ducados sobre el velador. A ser posible siempre busca terraza con sillones de enea con respaldos supergrandes y vela con guardabrisas en la mesa.
No comparto que el rancio no pueda tomar baños, lo que en ningún caso podrá hacer es tomar el sol. Su sitio en la playa es paseando, tomando un largo baño o bajo la sombrilla procediendo a la lectura del periódico de las tres letras. Su estancia en la playa en cualquier caso ha de ser breve y larga su presencia en el chiringo o en "el Castillito" en caso de encontrarse en Chipiona.
Respecto a su indumentaria su bañador ha de ser poco llamativo y sus alpargatas gastadas, la camisa en caso de ser un rancio de menor edad podrá sustituirse por un polito con los cuellos arriba para no quemarse el cuello mientras se da el paseo-oteo de féminas-tertulia cofradiera.
El rancio estaba en mi niñez en "Las Piletas" ya desaparecidas, de Sanlúcar, bebiendose un "curativo" vaso de agua , comiendo higos chumbos sentado en un banco viendo pasar a las chavalas, con el ABC "reliao" bajo el sobaco, pantalón de mil rayas celeste, sahariana y alpargatas "Festival" con calcetines de hilo...
osea, mi abuelo Antonio.
Yo, soy rancia y no soy calva, eso sí, me baño mas por dentro que por fuera, por eso de las mareas sanluqueñas, y como dije en una ocasión, mi verano ideal es oir en mi MP3 "Macarena" de Cebrián en mi querida Sanlúcar, en mi querida butaca saboreando una pedazo de "carmela" de las que venden por la playa mi amigo "pampin".
El rancio de costa gaditana, animal de costumbres, va de vez en cuando a por un cartuchito de chicharrones para hacer más llevadero el ratito hasta la hora de arena. Y allí a lucir su cadena doraita o plateada según prceda con la devoción propia al pecho y santiguazo antes de meterse de lleno en el Atlántico.
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